POR: DIANA SÁNCHEZ
ESET, la compañía líder en detección proactiva de amenazas, reveló que el robo de
identidad de menores de edad es muy común, y la información tiene el mismo fin que el
robo de identidad en adultos: apertura de cuentas bancarias para lavado de dinero,
adquisición de tarjetas de crédito, prestamos y obtener beneficios de la asistencia social.
Los ciberdelincuentes recopilan los datos personales de los niños de la misma forma que recopilan los datos de los adultos: phishing, infracciones de terceros, adquisición de
cuentas de redes sociales. compartir en exceso lo que se hace en redes sociales, fraude
familiar y robo físico.
El atractivo de esta información es que no tienen malas calificaciones crediticias, por lo
que las instituciones financieras o agencias gubernamentales no bloquearán la
información. Además, no se revisa la información de la cuenta bancaria o informes
crediticios, por lo que las estafas pueden pasar desapercibidas por años.
Para mantener segura la identidad de los menores, se recomienda prácticas como no
compartir demasiada información en redes sociales, monitorear las actividades en línea,
uso y actualización de software antimalware, explicar los peligros de las redes sociales y
limitar la cantidad de cuentas.
También se sugiere estar al pendiente de la llegada de facturas o estados de cuentas
inusuales en nombre del menor, Solicitudes de cuentas bancarias rechazadas debido a un historial crediticio negativo y llamadas de cobranza.
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